Según las premisas
de la Teoría de la Distorsión la naturaleza real de los encuentros cercanos con
OVNIs obedece a un fenómeno muy diferente al planteado por la hipótesis
extraterrestre. Dicha teoría indica que la interacción/comunicación mental
entre un agente externo desconocido y la psique de los testigos dan origen a
unas desconcertantes experiencias de encuentros con supuestas aeronaves y
humanoides de procedencia “no humana”.
El fruto de dicha “simbiosis mental” es la creación de
un “escenario ficticio” de pretendidas visitas alienígenas donde la
“escenografía” y “personajes” que se ponen en juego, pese a poder tener una
consistencia física, carecen de continuidad y permanencia real en el universo. Por
ello, todo lo representado ante los ojos de los testigos no es más que una
ficción “distorsionada” de los contenidos inconscientes de los propios
observadores, pero controlados y ejecutados por un agente no identificado. Si
esta premisa es cierta, la implicación del testigo en la “elaboración” de las
experiencias es mucho más trascendental de lo que se había pensado hasta el
momento. Por tanto, si los investigadores hubieran buceado en la mente de los
observadores, en busca del verdadero origen de los referentes visuales ó conceptuales
representados en su encuentro cercano los hubieran hallado sin dificultad. .
Así, la
teoría de la Distorsión establece que, conociendo información de sólo una de
las 2 partes que conforman este tipo de
vivencias, el testigo o el encuentro cercano, podemos "intuir"
elementos de la otra parte de forma precisa y desconcertante. Lo que demostraría
que se trata de un fenómeno de “creación mental compartida” entre la psique
humana y un agente externo. Por ejemplo, si leemos en un informe que el OVNI
tenía forma de helicóptero es muy probable que el testigo tenga algún tipo de
relación con el estamento militar (ser militar, vivir cerca de una base
militar, aficionado a las cuestiones castrenses o a la aviación, etc.). O si
por ejemplo, el testigo tiene conocimientos sobre un determinado área
(aficionada a la egiptología, electrónica, armas, etc.), es probable que esto
se vea reflejado en su supuesto encuentro con extraterrestres (OVNI en forma de
pirámide, con apéndices de ruedas o antenas o humanoides armados respectivamente). De hecho,
para certificar la conexión mental en el asunto OVNI, hay que señalar que el
mayor número de avistamientos registrados de humanoides parecidos al muñeco de
Michelin han ocurrido sobre territorio francés, de donde es, curiosamente,
originaria la famosa marca de neumáticos y donde estaría más presente el
icónico logotipo en el inconsciente de los testigos. Y tampoco es casual que
muchos ocupantes de OVNIs observados por niños porten pistolas y armas,
elementos muy latentes en el imaginario infantil. También podemos aplicar esta
regla a los elementos más extraños y singulares de la experiencia, y de los que
evidentemente no existe correspondencia en otros incidentes, ya que al tener su
naturaleza en la psique individual y privativa de los testigos, evidentemente
no pueden tener semejanzas con otros encuentros con OVNIs. Estos detalles
únicos pueden ofrecer una clave para comprender el fenómeno al que nos
enfrentamos. La preguntas que deberíamos formular al conocer estos elementos serían…
¿por qué una testigo ve un OVNI en forma de pirámide?, ¿por qué el platillo volador tenía esa
determinada forma o ese elemento determinado?, ¿por qué tiene ese símbolo en el
fuselaje?, ¿por qué el ocupante tenía ese aspecto concreto?, ¿por qué los
tripulantes le hablaron al testigo sobre esa materia y no otra?...
William Laxton, que trabajaba en una base militar, observó en el fuselaje de un OVNI unas letras y números, dispuestos de forma vertical, que parecían una distorsión de la siglas USAF. |
Pero la
pregunta clave de este encuentro sería ¿podemos rastrear el símbolo observado (la
esvástica) en la psique del testigo?. De
forma delatadora, Juan González Santos era un gran aficionado a los temas de la
Segunda Guerra Mundial y concretamente al bando alemán. Siguiendo esta interesante
premisa, el agente de policía Lonnie Zamora (Socorro, Nuevo México, 1964)
observó un símbolo en el fuselaje de un OVNI. ¿Cómo podría ser el “logotipo”
qué vería un patrullero?. Sospechosamente el signo distinguido por Zamora era
similar a una señal de tráfico. Si retomamos el suceso del Sr. Laxton las
letras y números que observó en el lateral del OVNI parecían una representación
“distorsionada” de la palabra USAF (muy presente en una base estadounidense). Los Pilotos Clarence S. Chiles y John B.
Whitted (Montgomery, Alabama, 1948) observan un ovni en forma alargada dividido
en secciones como los aviones y proyectiles de la época, y además es propulsado
por llamas, ¿qué otra cosa podría ver un piloto?. Y un último ejemplo, el
elemento más importante y célebre de la experiencia protagonizada por el
matrimonio Hill (Hampshire, 1961) era un supuesto mapa estelar observado en el
interior del OVNI. Si los investigadores se hubieran tomado la molestia de
visitar el lugar de trabajo de Betty, hubieran comprobado que sobre la pared
había colgado un mapa de la 2ª Guerra Mundial, concretamente del desembarco de
Normandía que es casi idéntico al “plano de rutas espaciales extraterrestre”… A
tenor de estos ejemplos, la conclusión más evidente es que hasta la fecha hemos
realizado las preguntas incorrectas…
Si el lector
se atreve a aplicar esta “ecuación” a los encuentros cercanos le auguramos
muchas sorpresas...
JOSE ANTONIO CARAV@CA
Hola jacarav@ca ¿Existe hoy algun caso bien cercano a nuestro tiempo documentado de forma tal en donde podamos corroborar esa distorsion de manera como lo haces con casos antiguos?
ResponderEliminarConsidero que hoy en dia existe tecnologia humana capaz de inducir esos estados alterados de forma quimica y tambien mendiante ondas, y hay que tener en cuenta que puede haber un grado de vulnerabilidad en ciertas personas, por lo que es factible y logico hacer diferencias en los tipos de distorsion, de los historicamente naturales y de los aparentemente manipulados por una inteligencia externa, aunque si hilamos profundo todo contiene una base inteligente y organizada.
En nuestro ahora todo el tiempo se distorsiona la realidad de nuestras mentes en diferentes grados, porque la mente se alimenta incansablemente desde los sentidos, un sonido, un aroma, una caricia, una luz, y tambien se encuentran las ideas como un producto casi final y predigerido dispuesto a ser compartido, entonces se decide entre varios creer en esas verdades y ya ha nacido algo y existe. Lo que sucede en la mente desde lo particular siempre es verdadero pero construido desde la interpretacion de otras verdades y convenciones logicas o no de las cuales se elije creer. Existe la distorsion por la necesidad natural de encontrar algo que llene esa realidad y le de sentido, esas verdades que deben ser comparadas, son establecidas como sea satisfactoriamente. Es como armar un puzzle en donde cada pieza se acomoda simbolicamente en su lugar y siemre tiene sentido.
Aqui te dejo una idea que distorsiona la realidad de manera profunda:
La multipicacion de los panes
La intencion se basa en la necesidad de la obtencion de un alimento que permita una estabilidad y tranquilidad para el desarrollo humano, es personal La busqueda es mental y la inspiracion se desarrolla con la herramienta de la inteligencia impulsada por el convencimiento en el bien final que va a producir. La idea alimento a la mente y creo la tecnologia necesaria para plasmarla en la realidad fisica, en ese momento ocurre el nacimiento, y se multiplica en otras ideas. Ese hombre ya puede disfrutar y compartir con su familia esa nueva forma vivir, en ese momento el ser se alimenta no solo fisicamente sino tambien con sentimientos profundos. Pero tambien se da cuenta que compartiendo la idea podia ayudar muchos a conocer el nuevo mundo. Compartio la idea y el sentimiento lleno por completo a la persona y la idea se convirtio en algo mas sublime que solo alimentar un cuerpo. Multiplico los panes.
Saludos
La ausencia en las últimas décadas de casuística OVNI comparable con la registrada desde mediados del Siglo XX invita a sospechar que nos enfrentamos a un paradigma de naturaleza incierta y con implicaciones psicológicas. Lamentablemente desde los años noventa... los encuentros cercanos se han desvanecido, y lo que existe a día de hoy, poco tiene que ver con lo ocurrido en aquellas prodigiosas décadas...
ResponderEliminarGracias por tu comentario...